viernes, 22 de febrero de 2008

DESMANTELAN BANDA DE HAKERS EN CANADA OPERABAN 100 PAISES

Por: Martin Gonzalez
Policía de la provincia canadiense de Québec ha desmantelado una red de hackers que se habían introducido en más de un millón de ordenadores de todo el mundo para robar datos personales, a través de los cuales han podido obtener un beneficio de 45 millones de dólares (31 millones de euros).

Según la nota hecha pública hoy por Seguridad de Québec (The Sûreté du Québec) han sido arrestados 17 piratas informáticos de entre 17 y 26 años, de los que tres son menores de edad. Los presuntos delincuentes informáticos tenían acceso a ordenadores de más de 100 países de todos los continentes, aunque los más afectados son Brasil, Polonia, México, Argentina, Italia, Alemania, Estados Unidos y la provincia canadiense de Minetoba.

Los procesados utilizaban sofisticados programas informáticos para introducir virus -especialmente troyanos y gusanos- en miles de ordenadores y convertirlos en zombies o bots, es decir, equipos controlados remotamente sin que sus dueños tengan constancia.
Una vez que se adueñaban de los ordenadores los utilizaban para realizar ataques a webs, con el objetivo de robar datos personales, interceptar comunicaciones o remitir masivamente correos electrónicos (spam).

El fin último de los hackers era la de conseguir dinero mediante el phishing, una práctica por la que los estafadores consiguen las claves para entrar en las cuentas bancarias de los clientes, ayudándose generalmente de engaños mediante el envío masivo de e mail y la suplantación de páginas webs de entidades financieras.

Los piratas, todos residentes en Quebec y que actuaban coordinadamente, buscaban equipos que tuvieran defectos en sus sistema de seguridad, en especial, en sus programas antivirus y cortafuegos (firewall). Se estima que han podido obtener un botín de 45 millones de dólares, aunque la Policía no ha dado detalles sobre la estafa, y se ha limitado a hablar de “daños en la infraestructura informática”.

Las investigaciones se iniciaron en el verano de 2006 a raiz de las quejas de varias empresas, instituciones gubernamentales y usuarios individuales.
De hecho, la policía canadiense confirmó que varios ordenadores gubernamentales estaban infectados, aunque no detalló de que países.

Los 17 arrestados han sido acusados de cargos como obtención ilegal de datos, hacking y posesión de contraseñas para cometer estafas. Las penas máximas a las que se enfrentan son de 10 años.